El sentimiento del odio se mantiene a raíz del amor, ya que de cierta manera estamos amando odiar algo, o alguien, dependiendo del punto en que se mire por cada sujeto.
En cambio amar algo, el sentimiento de odio se pierde en un minuto, si se afirma el amor como tal, desde la definición típica que se le da al amor.
También se podría entrar en el conflicto de que si algo es odiado para luego amarlo o viceversa, entramos en una ambivalencia si se da en estados en los cuales no se sabe realmente cual sentimiento se manifiesta más fuerte en acción del otro. O bien, si cualquiera de los dos sentimientos prevalecio fuertemente más tiempo en la persona, para luego manifestar el contrario a este, estariamos hablando en palabras de un tipo de personalidad bipolar, y me atrevo a usar este tipo de personalidad, ya que se manifiesta por largos periodos de tiempo.
Pero en ambas situaciones, y dandoles la explicación que se quiera dar, claramente para experimentar uno de los dos estados tenemos que haber conocido o vivir uno de los dos.
Sin mucha lógica, amas odiarme, cierto?!
You know love me